Cualquier solución formativa se diseña sobre la base de los resultados acreditados por el alumno previamente en las correspondientes pruebas de nivel.

Para los niños utilizamos las pruebas internas de Complementos.

Para los jóvenes y adultos utilizamos una prueba para determinar el nivel de conocimientos previos de inglés con los que el alumno acude a una determinada acción formativa (Quick Test), que nos ayuda a garantizar al máximo posible la homogeneidad del grupo formativo.

Se trata de una prueba fácil, rápida y fiable en la que el alumno es evaluado siguiendo los criterios ALTE (Association of Language Testers in Europe), buscando las equivalencias de nivel con los criterios evaluativos de la Cambridge Examinations y del Council of Europe Level.

El alumno es evaluado en relación a su acierto acreditado en una Prueba de Respuesta Múltiple de 40 ítems (en cuatro bloques de dificultad creciente), así como en la corrección acreditada en la Prueba de Uso Activo del Idioma de 20 ítems. Se trata de un ritmo creciente de dificultad hasta detectar un nivel constante de acierto que determina el nivel de conocimientos del alumno.